Fortalecer el core no solo alivia el dolor lumbar, sino que también reduce el riesgo de lesiones. 

Es fundamental comprender que la estabilidad del core, en lugar de una excesiva flexibilidad, es clave para mantener una espalda sana, sin dolor y resistente. 

En tu rutina diaria de entrenamiento, enfoca siempre parte de tu atención a esta área del core: la zona lumbar, abdominal y suelo pélvico. Mantente conectado a través de la respiración y activa los músculos centrales. 

La labor del core implica activar los músculos que sostienen la columna vertebral y la pelvis durante diversos movimientos.

Este compromiso de los músculos del core contribuyen a salvaguardar la columna vertebral, mantener una postura adecuada y perfeccionar el equilibrio.

Ahora, mira el video para descubrir cómo activar correctamente el core durante los ejercicios.